Atlético de Madrid y Valencia empataron sin goles en un partido de máxima igualdad en el estadio Vicente Calderón, escenario de un duelo de alta intensidad y tensión, al que le faltaron fútbol y ocasiones y que dio un punto a cada uno de estos aspirantes a las plazas de Liga de Campeones.
Ese resultado interrumpió la remontada del conjunto rojiblanco hacia los cuatro primeros puestos de la clasificación, aunque se mantiene invicto y sin goles en contra con el argentino Diego Simeone, y afianzó la fortaleza del Valencia en la tercera posición, aunque sumó un partido más a su sequía de victorias en el nuevo año.
Atlético y Valencia se frenaron uno a otro en el Calderón. No hubo concesiones en un encuentro que transmitió su relevancia desde el primer minuto, con constantes interrupciones y pelea por cada balón. Le faltó fútbol, continuidad en ataque, transiciones precisas en medio campo y, sobre todo, ocasiones durante los 90 minutos.
No encontró el Atlético el juego desplegado en la anterior cita ante su público, el convincente 3-0 al Villarreal, tampoco la verticalidad, las acciones decisivas de hombres como el turco Arda Turan, el brasileño Diego Ribas o Adrián López o los remates del colombiano Radamel Falcao en un choque de máximo equilibrio.
El plan del Valencia fue distinto. Quería seguridad atrás y contragolpe. La fórmula le bastó para lograr un punto, con el duelo más o menos controlado en su zona defensiva, conforme y con algún esporádica salida al ataque a la carrera del argentino Pablo Piatti o los desmarques de Roberto Soldado, pero casi sin llegadas claras.
La primera parte ofreció poco en ataque: un cabezazo de Adrián, a un pase fenomenal de Juanfran, repelido con una estirada de igual nivel del brasileño Diego Alves, y un remate apurado de Falcao, en el área visitante, y un disparo potente de Piatti, despejado con reflejos por el belga Thibaut Courtois, en la portería local.
El segundo tiempo arrancaba con todo abierto, con la sensación de que el primer golpe ofensivo, ya fuera de uno u otro equipo, podía ser definitivo para la resolución del choque y con el mando del juego para el Atlético, que, a ráfagas, se acercaba a la portería de Diego Alves, seguro por alto para desactivar los centros laterales.
Lo intentó Gabi, con un trallazo desde el borde del área que se perdió a unos centímetros del poste del guardameta brasileño, el uruguayo Diego Godín se retiró lesionado, tras un choque con el portero rival, y Courtois, en el otro área, despejó un inquietante centro, en un encuentro sin dueño sobre el césped ni en el marcador.
El tramo final del duelo reafirmó la idea del Valencia, defensa y contraataque, y animó las apariciones ofensivas del Atlético, que rozó el 1-0 en una acción de Falcao, sacada casi bajo la línea por el francés Abil Rami, y que asumió más riesgos con el paso de los minutos en un panorama sin pausa e incómodo para ambos equipos.
Los dos tuvieron una ocasión para ganar. El Valencia, en una buena y rápida jugada culminada con un disparo raso y cruzado de Jordi Alba, y el Atlético en un tiro desde el borde del área del brasileño Diego, despejada por su compatriota en la portería visitante. Nadie movió el marcador.
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